LXVIII

LXVIII

No sé lo que he soñado

en la noche pasada.

Triste, muy triste debió ser el sueño,

pues despierto la angustia me duraba.

Noté al incorporarme

húmeda la almohada,

y por primera vez sentí al notarlo

de un amargo placer henchirse el alma.

Triste cosa es el sueño

que llanto nos arranca,

mas tengo en mi tristeza una alegría...

¡Sé que aún me quedan lágrimas!

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Esta noche estoy dando vueltas en la cama como un tonto, ¿que hago?,¿que podria hacer?..nada yo no puedo solucionar nada y eso me fastidia, pronto volvere a estar lejos; malo; pero no puedo quedarme aqui, rabia es lo que siento y sigue sin servirme de nada, pero no es el momento de ver como todo se desmorona, no , ahora no. Esperemos que todo salga bien porque si no ..nose como lo afrontaré todo, y no es el momento, no me apetece ser la fuerte de la familia, no me apetece ser el bastón de todos, prefiero observar desde lejos como las cosas marchan bien, asique sencillamente esperaré...

Ultimamente no tengo tiempo de pensar en tonterias, ni de estar tranquila, pero ahora simplemente me apetece evadirme no quiero ver los problemas, no quiero....Tengo mi luz, es lo bueno;esa mano que siempre esta dispuesta a levantarme pese a todas las veces que caigo, y las que me quedan, sigo teniendo ese abrazo y esa mirada donde siempre puedo refugiarme en silencio, no hacen falta las palabras, no hace falta nada... y eso me hace feliz, esos momentos en los que el tiempo no tiene poder, en los que nada afecta y todo brilla por muy oscura que sea la noche, son esos ojos, sus ojos los que me permiten ese paraiso, ese refugio en el que simplemente estamos él y yo...nada mas...no hace falta nada mas.....